¿Cuántas veces te dijo tu madre de pequeño que hicieses la cama? Seguro que tantas ni lo recuerdas. Pues la mujer lo hacía por tu bien, porque hacer la cama mejora tu descanso. Tiene más beneficios de los que crees para tu salud. Te ayuda a cuidarte a ti mismo y a tu descanso, te contamos porqué.

Hacer la cama evita la acumulación de ácaros

Cuando haces la cama ventilas la habitación. Esto a su vez ayuda a que se aireé el colchón. De este modo evitamos la acumulación de ácaros. Lo ideal es que el colchón se ventile a diario, hay que dejarlo respirar. De esta forma no solo reduces que los ácaros se acumulan en él, sino que también eliminas posibles bacterias y se reduce la humedad. Piensa que si no lo haces de este modo te va tocar compartir colchón con pequeños animalitos que no te van a dejar descansar durante la noche.

Una cama recién hecha mejora tu descanso

Seguro que alguna vez te has ido a dormir con la cama sin hacer. ¿No te ha costado más conciliar el sueño? Cuando no hacemos la cama, la superficie del colchón no está lisa, está arrugada. Es por eso que a nuestro cuerpo le cuesta más relajarse y conciliar el sueño. Empezamos a dar vueltas, nos distraemos y al final nada, no descansamos bien. Ten en cuenta que hacer la cama nos obliga a tener el colchón limpio y aireado, tal y como comentábamos en el párrafo anterior. Un dormitorio con la cama bien hecha es un dormitorio limpio y esa es una de las reglas básicas de una habitación apta para descansar.

¿Es bueno hacer la cama nada más levantarse?

Como os comentábamos al inicio del post, el cochón necesita ventilarse. Es por eso que no es recomendable hacer la cama nada más levantarse. Si te levantas y acto seguido te pones a hacer la cama el colchón no se habrá ventilado. Estás ayudando a los ácaros a mantener su hogar intacto. ¿Cuál es nuestro consejo? Está claro, levántate, destapa tu colchón y déjalo que respire durante al menos 15 ó 20 minutos. Crea una rutina. Por ejemplo: sal de la cama, quita las sábanas, vete a desayunar y después vuelve hacer la cama. Durante ese tiempo tu colchón habrá respirado lo suficiente.

Crear un hábito mejora tu descanso

Tener rutinas mejora tu descanso, ya te lo contábamos en nuestro post sobre cómo dormir bien. Hacer la cama es también una rutina de tu día a día. Te ayuda a sentirte realizado y aporta una sensación de orden y limpieza. Esto va a beneficiar tu descanso, pues te irás a dormir sabiendo que tu trabajo está bien hecho 😉 En pocas palabras, hacer la cama es una acción diaria sencilla y rápida que te ayuda mejorar tu descanso. Pruébalo y nos cuenta qué tal, a nosotros nos está funcionando.